UNA REALIDAD QUE SE ACRECIENTA...
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| Muchas personas creen que la Iglesia en Estados Unidos ha venido desminuyendo de miembros debido al creciente número de escándalos que han ocurrido entre el liderazgo y que muchos van a buscar alimento espiritual, pero en cambio encuentran una iglesia más preocupada por el entretenimiento. |
Diana Bridgett, del Christian Post se dio a la tarea de entrevistar a varias personas y estas fueron algunas de las opiniones expresadas por los entrevistados.
Emily Michaels está terminando sus estudios de postgrado en el New York Theological Seminary de Nueva York. Cuando se le preguntó su opinión respecto a la trayectoria de la iglesia cristiana, dio una respuesta sorprendente. “Me gustaría ver a la iglesia operar como en los días de mi abuela. La iglesia en estos días se ha convertido en un espectáculo. Funciona igual que una obra de teatro en Broadway. Usted tiene su equipo de producción, cantantes, músicos, bailarines, parodias y secciones VP. y todo tiene que ocurrir en un momento determinado. Damos tanto tiempo para todas estas cosas, pero sólo se permite cinco minutos para que el Espíritu Santo aparezca. ¿Qué le pasó a la iglesia simple y sencilla?”
Cynthia Hartgrove, que asiste a una mega iglesia en Nueva Jersey, comparte su sentimiento. “He dejado de asistir a la iglesia por esa misma razón. Si quiero entretenerme, puedo ir al cine. No estoy diciendo que el canto y el baile no estén permitidos, pero cuando los coros cantan ante las cámaras, tengo un problema. Se necesita mucho para salir de la cama cuando tu corazón está cargado para asistir a la iglesia sólo para decepcionarte porque no recibes nada en el proceso.”
Algunos cristianos también están preocupados de que el cuerpo pastoral es visto como crítico en lugar de amar. “Hemos llegado a ser tan críticos y rigurosos en nuestro pensamiento”, dice Hartgrove. “Hemos creado una imagen de Dios que se ha hecho esperar para que hagamos algo mal, así que nos puede azotar dónde estamos. Ese es el pensamiento que rodea el amor de Dios en la predicación pequeña o colectiva.”
Con el auge de las iglesias ateas y organizaciones que cuestionan la autenticidad del mensaje cristiano, algunos cristianos creen que no se puede luchar esta batalla porque la iglesia no está bien en sí misma.
“Definitivamente hay una gran caída. El mundo está lidiando con asuntos difíciles para muchos en actualidad y este no es el momento para que la iglesia no cumpla su propósito”, dice Michaels. “Los jóvenes que han crecido en la iglesia con un abuelo o anciano saben de qué se trata iglesia. No estoy tan segura de que esta nueva iglesia es la que nos va a sostener en nuestras vidas”.
Hartgrove dice que la iglesia ya no es un lugar donde se puede refrescar su alma en tiempos de dificultad. “Muchas personas están sufriendo. Ellos vienen a la iglesia para ser restaurados y consolados. Muchos de nosotros estamos en crisis financiera y haciendo frente a graves problemas en nuestras vidas. La iglesia ya no sirve como un lugar de refugio, sino un lugar de dificultades. Se siente como que no hay alivio espiritual”.
Mark Rogers es anciano en su iglesia en Filadelfia. Entregó su vida al Señor desde la edad de cinco años y ahora tiene 72. Rogers ha visto que la iglesia ha experimentado tal transformación que ya no está seguro si será capaz de llegar a la altura de esta nueva ola de libre pensamiento. Él cree que la iglesia ha sacrificado el evangelio por la aceptación del mundo.
“La Biblia dice estar en el mundo, no ser parte de él. En nuestro afán de cambiar con los tiempos, hemos dejado de lado las tradiciones y enseñanzas básicas para adaptarnos a lo que es popular”, dijo Rogers. “Pasamos de las congregaciones de 300 a 30,000. La iglesia se ha convertido en un negocio. Lo que falta es el evangelio puro y la experiencia de la intimidad con el Señor. Esto es lo que estamos anhelando, la intimidad con Dios.” Qué opina de estos comentario?
Emily Michaels está terminando sus estudios de postgrado en el New York Theological Seminary de Nueva York. Cuando se le preguntó su opinión respecto a la trayectoria de la iglesia cristiana, dio una respuesta sorprendente. “Me gustaría ver a la iglesia operar como en los días de mi abuela. La iglesia en estos días se ha convertido en un espectáculo. Funciona igual que una obra de teatro en Broadway. Usted tiene su equipo de producción, cantantes, músicos, bailarines, parodias y secciones VP. y todo tiene que ocurrir en un momento determinado. Damos tanto tiempo para todas estas cosas, pero sólo se permite cinco minutos para que el Espíritu Santo aparezca. ¿Qué le pasó a la iglesia simple y sencilla?”
Cynthia Hartgrove, que asiste a una mega iglesia en Nueva Jersey, comparte su sentimiento. “He dejado de asistir a la iglesia por esa misma razón. Si quiero entretenerme, puedo ir al cine. No estoy diciendo que el canto y el baile no estén permitidos, pero cuando los coros cantan ante las cámaras, tengo un problema. Se necesita mucho para salir de la cama cuando tu corazón está cargado para asistir a la iglesia sólo para decepcionarte porque no recibes nada en el proceso.”
Algunos cristianos también están preocupados de que el cuerpo pastoral es visto como crítico en lugar de amar. “Hemos llegado a ser tan críticos y rigurosos en nuestro pensamiento”, dice Hartgrove. “Hemos creado una imagen de Dios que se ha hecho esperar para que hagamos algo mal, así que nos puede azotar dónde estamos. Ese es el pensamiento que rodea el amor de Dios en la predicación pequeña o colectiva.”
Con el auge de las iglesias ateas y organizaciones que cuestionan la autenticidad del mensaje cristiano, algunos cristianos creen que no se puede luchar esta batalla porque la iglesia no está bien en sí misma.
“Definitivamente hay una gran caída. El mundo está lidiando con asuntos difíciles para muchos en actualidad y este no es el momento para que la iglesia no cumpla su propósito”, dice Michaels. “Los jóvenes que han crecido en la iglesia con un abuelo o anciano saben de qué se trata iglesia. No estoy tan segura de que esta nueva iglesia es la que nos va a sostener en nuestras vidas”.
Hartgrove dice que la iglesia ya no es un lugar donde se puede refrescar su alma en tiempos de dificultad. “Muchas personas están sufriendo. Ellos vienen a la iglesia para ser restaurados y consolados. Muchos de nosotros estamos en crisis financiera y haciendo frente a graves problemas en nuestras vidas. La iglesia ya no sirve como un lugar de refugio, sino un lugar de dificultades. Se siente como que no hay alivio espiritual”.
Mark Rogers es anciano en su iglesia en Filadelfia. Entregó su vida al Señor desde la edad de cinco años y ahora tiene 72. Rogers ha visto que la iglesia ha experimentado tal transformación que ya no está seguro si será capaz de llegar a la altura de esta nueva ola de libre pensamiento. Él cree que la iglesia ha sacrificado el evangelio por la aceptación del mundo.
“La Biblia dice estar en el mundo, no ser parte de él. En nuestro afán de cambiar con los tiempos, hemos dejado de lado las tradiciones y enseñanzas básicas para adaptarnos a lo que es popular”, dijo Rogers. “Pasamos de las congregaciones de 300 a 30,000. La iglesia se ha convertido en un negocio. Lo que falta es el evangelio puro y la experiencia de la intimidad con el Señor. Esto es lo que estamos anhelando, la intimidad con Dios.” Qué opina de estos comentario?
* Vivimos un evangelio light!!
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