Los epigrafistas Sven Gronemeyer y Erik Velásquez de la Universidad de La Trobe (Australia) aseguraron que la citada inscripción en el Monumento 6 de Tortuguero solo señala una fecha sobre la terminación de un ciclo y el comienzo de otro , período en el que retornaría una de las deidades mayas, el dios Bolon Yokte.
El astrofísico Jesús Galindo aclaró que aunque los mayas fueron grandes astrónomos, ni ellos “ni la ciencia actual estarían en posibilidades de plantear un 'fin del mundo'”. El científico consideró imposible tratar de pronosticar que un cometa “extermine” a la humanidad, “pues es un evento que no se puede predecir con exactitud”.
Además, las personas hablan “de las grandes erupciones en el Sol que suceden cada 11 años, pero por suerte tenemos un escudo magnético que evita que nos afecte”, aseguró.
CALENDARIO EQUIVOCADO
Por su parte, la historiadora mexicana Laura Caso Barrera explicó que la única predicción conocida de los mayas fue escrita en el libro Chilam Balam de Ixil en el siglo XVIII, quienes retomaron una profecía babilónica divulgada por el sabio Beroso del siglo III a.C., a partir de la cual anunciaron el fin del mundo para el año 1887 de nuestra era.
Los expertos concluyeron que todas las versiones sobre el “fin del mundo” son rumores y leyendas que sacan de contexto la visión de las antiguas culturas. Añadieron que este fenómeno es parte de la necesidad de creer de mucha gente como consecuencia de la inestabilidad política y económica o por el cambio climático.